how to love

• — ¿Y qué pasa si te enamoras?

— ¿Crees en eso?

— Hablo de “amor” no de “Papá Noel”.

Me encantan tus ojos tan marrones y esa sonrrisa tan blanca. Mi corazón siempre que te ve se acelera, me entra algo extraño en la barriga, lo suelen decir mariposas en el estómago ,tonterías sin más. Me entra un temblor por las piernas, y lo único que quiero hacer es saltarte como una histérica de las rebajas y tu fueras mi prenda favorita que acabo de encontrar de casualidad. Eres como eso, una prenda que me encanta, o algo así, porque te quiero llevar siempre conmigo, a todas partes, y no quitarte nunca de ningún sitio. Pero es que me encantas demasiado, me encanta que siempre hagas el idiota, o lo seas, que me hagas reír. Que me encantas tú y todo lo que haces, cada uno de tus movimientos, suspiros, parpadeos, sonrisas, miradas y todo eso que haces tan bien como tú sabes.

bipolar;

Tell me something sweet to get me

No importa cuantas veces caíste, si cada vez te volviste a levantar. Cada vez que te levantes hazlo con más fuerza, unos caminando por este largo camino se perdieron, otros no aguantaron todo ese peso encima de sus hombros y se rindieron, pero tú debes de aguantar y seguir fuerte. La vida no consiste en la prisa de correr, si no en llegar. No importa si perdiste una partida, acepta que ganaste en experiencia. Esto no se trata de rapidez, si no de resistencia. En medio del error cometido ten la valentía de decir: me equivoqué. Y si caíste estando a punto de llegar, ten el valor de levantar y de... volver a empezar.

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Pasaba el tiempo y se daba cuenta de que habían pasado unos cuantos meses desde que todo empezó, y no podía negar que todo había sido nuevo para ella. No podemos decir que después de unos años de idas y venidas no hubiese aprendido nada sobre como podían llegar a ser esas cosas, pero para ella, todo era completamente diferente. Era él, era la sensación de ser mejor persona, de crecer sin darse cuenta.  Pasaba el tiempo y al seguir soñando con todo lo que tenía se dio cuenta de que no la vendría mal unos cuantos meses más. Incluso más de unos cuantos. Recordó las peores épocas, cuando pensaba que no podía aguantar más y empezó a coger miedo. Aquellas palabras que se repetía una y otra vez sonaron sin quererlo en su cabeza 'por todo lo malo, algo bueno vendrá'.
Pasaba el tiempo y sin haberse dado cuenta, se sintió una de las personas más sabias que había llegado a conocer hasta ese momento.

shit, i love you

Vale, puede que no sea una chula que va imponiendo por las calles, y tampoco soy una callada que no hace nada. No soy santa, pero tampoco una jodida zorra.Tampoco soy una chica que viste tal y como se pone la ropa en los escaparates, no soy muy normal, y no digo con eso que quiera serlo.  No te prometo nada, ni el sol, ni la luna, ni las estrellas, no prometo amor eterno, no te prometo nada que cualquiera pudiese  prometer, no quiero prometerte nada, ni siquiera deseo usar un "te prometo".
No te voy a asegurar que me acuerde de todas las cosas, y si me acuerdo, pocas te las diré. No quiero que te quedes todo el día conmigo, pero tampoco que me dejes de lado y solo me llames de tanto en tanto. No te puedo jurar que no tenga defectos, ni que no cometa errores. 
Puedo llegar a ser una estúpida, y a veces mi orgullo me gana y me convierto en una prepotente. No te aseguro que sea la mejor, ni la más guapa, no creo que llegue a ser tan simpática como todas esas chicas. No tengo un pelazo, ni unos ojos que los miras y te enamoras, mi sonrisa es horrible, y odiarás como me río. Tendrás que perdonarme bastantes veces. Mis bromas llegan a ser un poco odiosas y cansan, y te diré barbaridades con un: "es broma, no te enfades" detrás sabiendo lo que viene después. Me arrepentiré cientos de veces de no decir lo que podría llegar a decirte. Pero, lo único que te puedo prometer es que te cuidaré aunque no tenga fuerzas, te haré reír cuando yo no puedo ni sacarme una minúscula sonrisa, y que te voy a querer como yo sé.

fuck, I need you.

Por pedir, pido veinticuatro horas a tu lado en las que nos dé tiempo a todo menos a perder el tiempo. Me pido entonces tus dedos acariciando mi pelo. Por pedir, pido dar un paseo al mismo paso, frenarnos en seco de repente, y mojarnos los labios sin que nos vea la gente. Pido pararnos unos segundos ante cualquier escaparate, continuar andando, y que, momentos después, me preguntes cuánto costaba esa cosa. Entonces me pido contestarte que no lo sé, que no me fijé, porque lo único que he sido capaz de ver en el cristal ha sido tu imagen reflejada. Si fuera por pedir pediría un mundo contigo y mi lista sería tan grande que necesitaría todo el papel del mundo, pero aquí lo importante no es lo que pido yo sino lo que pides tú ¿que pides tú?

y si existe, que me lleve con él.

Yo no busco nada raro. Sólo alguien que me extrañe aunque hayamos pasado todo un día juntos. Alguien que se ponga nervioso al verme, que no se aburra de mis charlas aunque pasemos cinco horas en el teléfono, que se alegre de escucharme. Alguien que me acompañe siempre a casa y haga divertido el camino, por más largo que sea; alguien a quien pueda besar por un simple impulso sin sentirme atrevida. No me importan los regalos, las cenas ni las flores mientras él demuestre admiración. Me conformo con saber que conmigo es donde más le gustaría estar siempre. Y si estuvieras aquí, nada me gustaría más que vivir todo con contigo. Y que conozca todas y cada una de mis sonrisas, alguien que sólo por mí de todo, que elija quedarse conmigo aunque tenga otros planes, que sienta que antes de mí ninguna otra existió, que sus amigos se cansen de escuchar mi nombre, que escriba las cartas más bonitas del mundo entero aunque tenga la letra fea y sean de dos renglones. Que él piense en mí, mucho más de lo que lo acepta, que sienta que se cae el mundo si discutimos y me abrace tirando su orgullo a la mierda, alguien que me haga reír hasta llorar, y me haga reír cuando no puedo dejar de llorar.